Suponte que estás en la década de los sesenta del Siglo XIX. Imagínate que, como hoy y la mayoría de la población, eres parte de esa clase social llamada «Proletariado». Acabas de marchar junto a tu familia del pueblo donde de niña jugabas a subirte a los tortuosos olmos que crecían junto al río. Habiendo ahorrado un pequeño capital, os dirigís hacia Barcelona. «En la ciudad hay mejores oportunidades», le aseguraron a tu padre algunos vecinos que un año atrás habían migrado.
Aunque los primeros días vivís en casa de Ramón y Josefa, conseguís alquilar una pequeña vivienda en Poblenou, barrio típicamente obrero de Barcelona. Ahora toca buscar trabajo, pues la vida en la ciudad es carísima y cada vez hay menos dinero.
Sales a ofrecerte a distintas fábricas textiles, industria muy boyante en la Ciudad Condal por esta época. Como tú hay miles que tratan de llevar un salario a casa para poder sobrevivir y, si hay suerte, darse unos caprichos de vez en cuando. Te acercas a Can Ricart, una fábrica situada en el mismo barrio. El edificio que alberga la fábrica es bastante moderno. Te encuentras ante lo que parece una gran empresa: la gente habla de sus logros y sientes que hoy podría ser tu día de suerte.
Preguntas por el capataz. Llevas en tu mano una carta de recomendación del alcalde de tu pueblo. Él aparece de entre cientos de trabajadoras. Te diriges a él en actitud servil. Te has aseado lo mejor posible para dar buena impresión. Le explicas lo responsable y sacrificada que puedes llegar a ser. Él te mira de arriba a abajo sin emoción alguna: ¡son tantas las personas que pasan delante de sus narices mendigando un empleo!
Tras unas preguntas de rigor, el capataz te ofrece un puesto de trabajo con las siguientes condiciones: doce horas al día, desde las 6 de la mañana hasta las 12 del mediodía y de 4 a 8 de la tarde, aunque la jornada se adaptará a las horas de luz que haya y según los pedidos pendientes que se deban sacar. Esto significa que, de vez en cuando, te tocaría trabajar hasta dieciséis horas al día o puede que estés durante una temporada sin empleo. Lo último sucedería, además, si cayeras enferma, pues la fábrica no podría cargar con tu manutención debido a los costes. «Has de saber -te dice el capataz- que en este oficio la gente enferma a menudo de los pulmones, así que ya sabes a lo que te expones». Tú afirmas con la cabeza, pensando que lo importante es llevar un jornal a casa para que puedan comer los tuyos.
La jornada semanal será de lunes a sábado, por supuesto. Los amos de la fábrica decidieron hace unos años que las trabajadoras sólo disfrutarían vacaciones los domingos -con la obligación de ir a misa- y algunas fiestas de guardar, como Viernes Santo y Navidad. En cuanto a tu desempeño, entrarías como personal no cualificado y cobrarías como tal: una miseria; aunque el capataz te revela un secreto que no debes contarle a nadie: le caes bien, así que te encomendará desde el primer día una serie de funciones que él considera estás suficientemente capacitada para realizar.
Aceptas el puesto. Das tu palabra en que cumplirás fielmente tu desempeño.
El capataz, al cual llamarás de ahora en adelante, don José Luis, te enseña ahora el lugar donde trabajarás: es oscuro y hace calor. Sientes que el aire está cargado. Los materiales textiles y químicos se acumulan sin ton ni son en los lugares más insospechados. Algunos incluso tapan las puertas que dan al exterior.
Muy pronto escuchas a otras como tú quejarse de las condiciones de trabajo. Se quejan, pero no hacen mucho por remediar esta situación. Sin embargo, poco a poco el malestar va aumentando y, ya unas decenas de operarias, deciden proponer una serie de mejoras que permitan el desempeño de la labor de manera más justa.
Las trabajadores escogen un pequeño grupo de compañeras para dirigirse a los patrones. En cuanto estos conocen los nombres de estas portavoces, las despiden con determinación de acallar cualquier intento de cambio que perjudique su bolsillo.
Dudáis. Tenéis miedo y no queréis follones. Algunas comentan que ya sabíais cuáles eran las condiciones de este trabajo. Pero, ¿se puede sobrevivir sin trabajar? ¿Es que estamos en las mismas circunstancias que los amos? ¿No aceptamos este y todos los empleos porque no nos queda otro remedio? Finalmente, tras varias discusiones en torno a qué hacer, las operarias textiles deciden parar las máquinas hasta que la fábrica readmita a las compañeras despedidas. Así mismo, entienden como parte de la reivindicación trabajar ocho horas al día, que todas cobren lo mismo y no haya discriminación, y que las vacaciones no dependan de las fechas o eventos religiosos.
La lucha es dura, muy dura. Los amos tienen conocidos en el Gobierno Civil y en la Policía, y recurren a ellos para frenar las reclamaciones. La fábrica busca esquiroles entre gente desesperada y otras sin escrúpulos ni conciencia de clase. Con ello pretende evitar la bajada en la producción y el colapso económico.
Pasan los días. Las trabajadoras no ceden en su empeño por mejorar sus condiciones. Obreros de otras industrias les apoyan moral y financiando su día a día.
A la sexta semana de huelga, tras muchas jornadas de presión, los patrones ceden parcialmente ante las demandas de sus trabajadoras. Esta conquista de derechos no ha hecho más que comenzar y ellas saben que tendrán que defender con uñas y dientes cada mejora que consigan. Porque cada cosa alcanzada supone acercarse a una mayor igualdad de oportunidades y derechos respecto al amo, hasta el día en que desaparezcan quienes mandan y debemos obedecer.
martes, 28 de febrero de 2017
Yo acepté las condiciones de la empresa en el momento en que firmé
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lunes, 20 de febrero de 2017
Buzón de lucha contra el fraude laboral
¿Te sientes incapaz de denunciar a Inspección de Trabajo la vulneración de derechos a la que te someten en el trabajo, por temores a que la empresa te represalie, porque no quieres meterte en follones o porque eres de la opinión que lo firmado por ti va a misa, aunque hayas firmado que te sacarán los ojos? Pues ya casi no tienes excusa: resulta que hace tiempo que lleva funcionando un buzón de denuncias anónimas de fraude laboral.
Mediante este sistema que puedes utilizar a través de Internet, puedes notificar qué está haciendo mal tu empresa, para que la Inspección se acerque una mañana cualquiera de primavera y reverdezcan los tiernos prados y broten las más hermosas flores. Aquí te dejamos una captura de pantalla del formulario, y la dirección de este buzón para que hagas buen uso del mismo: http://www.empleo.gob.es/buzonfraude/
Mediante este sistema que puedes utilizar a través de Internet, puedes notificar qué está haciendo mal tu empresa, para que la Inspección se acerque una mañana cualquiera de primavera y reverdezcan los tiernos prados y broten las más hermosas flores. Aquí te dejamos una captura de pantalla del formulario, y la dirección de este buzón para que hagas buen uso del mismo: http://www.empleo.gob.es/buzonfraude/
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sábado, 18 de febrero de 2017
Delegar en otros o asociarse para luchar por nuestros derechos
Cuando quiero defender los derechos que ya me son reconocidos por ley o conquistar mejores condiciones, puedo:
Buscar una mediación estatal:
La puedo utilizar cuando no esté de acuerdo con una decisión empresarial que afecta a mis derechos, o si no hay una fuerza sindical o solidaria por parte de la plantilla que evite mediante presión de grupo esa vulneración de las libertades. Principalmente, existen los siguientes mecanismos:
Denunciar a Inspección de Trabajo, a través de un formulario. En otro artículo ya se habló de cómo llevar a cabo la estrategia de denuncia. Puedo denunciar en solitario o con más gente.
Beneficios de esta mediación:
Problemas que pueden darse con esta mediación:
Cuando yo mismo y/o más trabajadores nos presentamos o participamos en unos comicios llamados elecciones sindicales, el candidato con mayor número de votos es elegido delegado de personal, ostentando el cargo de representante de toda la plantilla durante cuatro años o más, le haya votado o no. En una empresa de más de cincuenta trabajadores, se eligen cinco o más delegados de personal que, aunque no se quieran ver ni en pintura, se constituyen en un comité de empresa.
El delegado de personal y el comité de empresa tienen determinadas garantías laborales:
Problemas que pueden darse o se dan con este tipo de representatividad:
- Buscar una mediación estatal, para lo cual existen organismos como la Inspección de Trabajo o los Juzgados de lo Social.
- Delegar en uno o varios trabajadores o ser nombrado delegado por los compañeros de trabajo, para lo cual existe la llamada representación unitaria.
- Asociarse en igualdad de condiciones con aquellos compañeros con quien comparta unas ideas sobre el mundo del trabajo, para lo cual existe la representación sindical.
- Asociarse en igualdad de condiciones con los compañeros de trabajo, independientemente de la ideología de cada uno pero con objetivos en común, para lo cual existe la asamblea de trabajadores.
Buscar una mediación estatal:
La puedo utilizar cuando no esté de acuerdo con una decisión empresarial que afecta a mis derechos, o si no hay una fuerza sindical o solidaria por parte de la plantilla que evite mediante presión de grupo esa vulneración de las libertades. Principalmente, existen los siguientes mecanismos:
Denunciar a Inspección de Trabajo, a través de un formulario. En otro artículo ya se habló de cómo llevar a cabo la estrategia de denuncia. Puedo denunciar en solitario o con más gente.
Beneficios de esta mediación:
- Aprendo a recopilar pruebas del incumplimiento empresarial.
- Es gratis y muy fácil de usar porque no necesito conocimientos avanzados en legislación laboral.
- Puedo resolver algunos problemas a un coste personal muy bajo, porque no me expongo y encima recupero esos derechos que la empresa me está robando.
- La empresa no sabe que he sido yo quien ha puesto la denuncia.
- Si envío el burofax a la empresa diciendo que soy yo quien ha puesto la denuncia, me garantizo el bloqueo del despido y cualquier acto represivo de la empresa, ya que en posibles conflictos judiciales, este hecho actuaría como indicio o prueba de vulneración de los derechos fundamentales.
- Las multas a la empresa pueden ser de órdago, lo que puede evitar que sigan dando por saco.
- Depende de lo que denuncie, entra o no dentro de las competencias de este organismo.
- Puede tardar más o menos, según el número de inspectores y la carga de trabajo de estos.
Problemas que pueden darse con esta mediación:
- Previamente a la demanda, hay que acudir a un ridículo acto de conciliación, para ver si se llega a un acuerdo con la empresa.
- Requiere ciertos conocimientos en terminología jurídica.
- Aunque no es necesario abogado, es recomendable disponer de uno.
- Si el abogado que elijo o me toca -a través de la Justicia Gratuita- no es muy cuco, no voy a conseguir mucho como no me lo curre yo.
- No es gratis a no ser que me represente a mí mismo.
- Puede tardar cierto tiempo.
- Me puede tocar un juez que interprete las leyes a favor de la empresa.
- Si pierdo, o si gano y la empresa no está de acuerdo con la sentencia, una instancia superior revisará el caso, lo que tardará nuevamente cierto tiempo.
- Aprendo qué pruebas e indicios son válidos y cuáles no valen un pimiento. Me doy cuenta de que los juicios no son como en Estados Unidos, y aquí poco o nada se pregunta al trabajador, que debe aportar la información en la misma demanda.
- En el proceso aprendo a no ponerme nervioso ante los personajes que pululan en los juzgados, como el secretario judicial o el mismo juez, que buscarán que me conforme con la miseria que ofrece la empresa.
- Aprendo que el coste personal es bajo comparado con no hacer nada y seguir perdiendo derechos.
- Si el abogado que elijo o me toca es cuco y encima me lo curro, voy a ser protagonista de «la vuelta al mundo en ochenta días», ya que cuando gano y ya no hay instancia superior a la que recurrir, me dan un papelito que es la sentencia donde se obliga a la empresa a cumplir la ley y encima indemnizarme.
- Me garantizo el bloqueo del despido y cualquier acto represivo de la empresa.
Cuando yo mismo y/o más trabajadores nos presentamos o participamos en unos comicios llamados elecciones sindicales, el candidato con mayor número de votos es elegido delegado de personal, ostentando el cargo de representante de toda la plantilla durante cuatro años o más, le haya votado o no. En una empresa de más de cincuenta trabajadores, se eligen cinco o más delegados de personal que, aunque no se quieran ver ni en pintura, se constituyen en un comité de empresa.
El delegado de personal y el comité de empresa tienen determinadas garantías laborales:
- Ante sanciones por faltas graves o muy graves, se tendrá en cuenta su opinión.
- Tendrán prioridad de permanencia en la empresa.
- No podrán ser despedido ni sancionado durante el ejercicio de sus funciones ni dentro del año siguiente a la expiración de su mandato.
- Podrán expresar con libertad sus opiniones.
- Pueden ausentarse de su trabajo durante determinadas horas al mes (quince, para una empresa de entre cincuenta y cien trabajadores), para realizar actividades sindicales, como ir a los juzgados a poner demandas, cumplir con sus responsabilidades en el sindicato o acudir a manifestaciones: es lo que se conoce como liberados sindicales.
- Ser informados y consultados por el empresario sobre aquellas cuestiones que puedan afectar a los trabajadores, sobre la situación de la empresa y la evolución del empleo.
- A emitir informes con carácter previo, sobre reestructuraciones de plantillas y ceses totales, definitivos, parciales o temporales, reducciones de jornada, traslado total o parcial de instalaciones, procesos de fusión, absorción o modificación del estatus jurídico de la empresa que incida en el volumen de empleo, planes de formación profesional y sistemas de organización y control de trabajo.
- Ejercer una labor de vigilancia en el cumplimiento de las normas laborales, de seguridad social y de empleo; condiciones de seguridad y salud en el trabajo; aplicación del principio de igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres.
- Participar en la gestión de obras sociales en beneficio de los trabajadores y sus familiares.
- Colaborar cuando se determine por convenio colectivo, con la dirección de la empresa en el incremento de la productividad y en la puesta en marcha de medidas de conciliación.
- Informar a sus representados de los temas y asuntos que repercutan en las relaciones laborales.
Beneficios de este tipo de representatividad:
- Mayor acceso a información de la empresa que permita anticipar situaciones de riesgo para los trabajadores.
- Mayor protección ante represalias por parte de la empresa.
- Que el resto de trabajadores se desentiendan de la lucha por sus derechos, pensando que ya está para eso el delegado, dándose una dinámica en la que al final nadie salvo él conoce qué derechos hay y qué se debe hacer para defenderlos.
- Que el delegado sea un paquete, no conozca la legislación ni tenga espíritu combativo o no sienta que son suyos los problemas de los demás.
- Que el resto de trabajadores abandonen las prácticas solidarias y de apoyo mutuo entre compañeros de trabajo, dejando manga ancha a la empresa para hacer lo que le salga de los huevos.
- Que tome decisiones que sean lesivas para otros trabajadores, amparándose en su posición.
- Que no se le vea el pelo por el trabajo.
- Que se le vea como un privilegiado respecto al resto de la plantilla, al disponer de las garantías y derechos citados.
- Que a lo largo de los años y por malas decisiones y falta de transparencia de este tipo de figuras, la gente termine pensando que los sindicalistas son unos frescos y que no solucionan los problemas de los trabajadores.
- Que a lo largo de los años, los trabajadores adquieran una desgana tan grande a la hora de defender sus derechos y los de sus compañeros, que las empresas nos obliguen a aceptar al resto unas condiciones de trabajo miserables.
- Que se establezca una lucha entre trabajadores a ver si sale su delegado o su sindicato victorioso en las elecciones sindicales.
- Hay una clara y privilegiada diferencia de trato, auspiciada por la Ley de Libertad Sindical, en comparación al resto de trabajadores pero también a la representación sindical, siguiente punto de este artículo.
Representación sindical:
Cuando yo mismo y/o varios trabajadores de una empresa nos afiliamos a un sindicato, podemos, además, establecer legalmente una sección sindical, que exclusivamente nos representa a nosotros mismos, nombrando una figura interlocutora ante la empresa, llamada delegado sindical. Ojo, no estamos hablando de un delegado de todo el personal, sino de los afiliados a un determinado sindicato que trabajan en una empresa. Por tanto, la sección sindical jamás funcionará como un comité de empresa: podrá lograr mejoras que te afecten, pero nunca decidirá por ti.
Los derechos de los trabajadores afiliados a una sección sindical son los siguientes:
- Celebrar reuniones, previa notificación al empresario.
- Recaudar cuotas con las que sustentar a su sindicato.
- Distribuir información sindical, fuera de las horas de trabajo y sin perturbar la actividad normal de la empresa.
- Recibir información que le remita su sindicato.
Hay derechos que pueden disfrutar las secciones sindicales y sus delegados (sindicales que no de personal, recordemos), siempre y cuando sean representativos en la empresa. Pero esta representatividad viene dada básicamente por la presencia que tenga el sindicato en cuanto a número de delegados de personal o fuerza en el comité de empresa.
Beneficios de este tipo de representatividad:
- Una mayor necesidad de los trabajadores en conocer la legislación vigente.
- Una mayor necesidad de implicarse en la defensa/conquista de los derechos, ya que los sienten como propios, y de apoyarse mutuamente cuando la empresa ejerce represalias contra algún compañero.
- Las decisiones, al tomarse en conjunto, ayudan a que no haya autoritarismo o favoritismos.
- Cambio de mentalidad en los trabajadores hacia la idea de que el sindicato, es decir, todos a una, es la mejor herramienta para defendernos de los atropellos de las empresas y sus directivos.
- Mayor presión para la empresa gracias al número de trabajadores que participan en la lucha sindical.
- Se evita la lucha de poder entre candidatos y organizaciones que tendrían que ir a lo mismo: hacia la conquista de mejores derechos laborales para tener más cerca la ansiada igualdad de derechos y oportunidades.
- La pertenencia a una organización sindical y al mismo tiempo ejercer actos reivindicativos de derechos, supone la posibilidad de bloquear el despido.
Problemas que pueden darse con este tipo de representatividad:
- Que si la sección no tiene muchos trabajadores afiliados en el centro de trabajo, carezca de fuerza para pelear por mejores condiciones que las establecidas por la Ley, acceder a la información relevante de la empresa y a todos los derechos que sí se le reconocen a los representantes unitarios (delegado de personal y comité de empresa).
- Tener que luchar cada uno de los derechos que se quieren conseguir.
Asamblea de trabajadores:
Lo que dice la Ley es que los trabajadores de una misma empresa o centro de trabajo tienen derecho a reunirse en asamblea, la cual podrá ser convocada por un treinta por ciento de la plantilla o por sus representantes. Lo que dice la historia del Movimiento Obrero es que este es el modo de organizarse más sencillo pero no por ello menos útil, entre trabajadores para hablar de lo que les concierne y trazar estrategias que ayuden a resolver problemas con los amos o conquistar derechos.
¿Cuál es el camino más difícil pero que da mayores beneficios a medio y largo plazo? Desde esta sección sindical ya se ha dicho: la fuerza del número y el inconformismo son los dos pilares que ayudan a que ganemos derechos. La mediación y la delegación en otros, a corto plazo puede ser útil, pero a medio y largo plazo provoca que no podamos conquistar más derechos que los que nos reconocen las leyes laborales y que haya falta de actitud, conocimiento e inteligencia colectiva para superar las desigualdades que nos golpean a diario en nuestros puestos de trabajo.
Lo que dice la Ley es que los trabajadores de una misma empresa o centro de trabajo tienen derecho a reunirse en asamblea, la cual podrá ser convocada por un treinta por ciento de la plantilla o por sus representantes. Lo que dice la historia del Movimiento Obrero es que este es el modo de organizarse más sencillo pero no por ello menos útil, entre trabajadores para hablar de lo que les concierne y trazar estrategias que ayuden a resolver problemas con los amos o conquistar derechos.
Beneficios de este tipo de representatividad:
- Horizontalidad, pues aunque unos trabajadores sepan más de leyes o de la defensa de los derechos, todo el mundo puede opinar y participar. No hay privilegios entre sus componentes y, sin embargo, el hecho de hacerse presente en la asamblea, de participar en la misma, puede ser objeto de bloqueo de despido.
- Los nombrados en el anterior punto -representación sindical- y un aprendizaje empático respecto a los compañeros que tienen dudas, no saben, quieren radicalizar el conflicto, etc.
- Aún mayor presión todavía para la empresa que con la intervención de la representación sindical, debido a un intercambio de puntos de vista más rico sobre cómo están y hacia dónde deben ir los derechos de todos.
- La la lucha de poder entre candidatos y organizaciones y las diferencias ideológicas quedan en un segundo plano, ya que es el interés común lo que prima.
Problemas que pueden darse con este tipo de representatividad:
- Manipulación por algunos trabajadores «trepas» o que escondan intereses empresariales, personales o de su propia organización sindical.
- Asamblearismo sin ningún objetivo, ya sea porque no hay gente que sepa centrarse en los problemas comunes, cómo lucharlos y/o sean los trabajadores poco reivindicativos.
- La asamblea debe pelear con la empresa de manera constante, perseverando, ya que la legislación le otorga pocos derechos.
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jueves, 16 de febrero de 2017
Cómo enfrentarse a los abusos patronales
Es fácil perder la perspectiva si leemos siempre los mismos periódicos, vemos las consabidas cadenas de televisión o consultamos los habituales sitios web: podemos caer en la idea de que todo es genial o que el mundo se va a la mierda y es imposible hacer nada...
Sin embargo, en Internet, quienes pertenecemos a la clase trabajadora contamos con información que no sale generalmente en los medios por diferentes motivos, y que relata qué está sucediendo en el mundo del trabajo asalariado y cómo se está luchando o podríamos hacerlo. Por eso, desde esta sección sindical se te anima a consultar los siguientes enlaces (irán aumentando, a medida que vayamos encontrando más):
Sin embargo, en Internet, quienes pertenecemos a la clase trabajadora contamos con información que no sale generalmente en los medios por diferentes motivos, y que relata qué está sucediendo en el mundo del trabajo asalariado y cómo se está luchando o podríamos hacerlo. Por eso, desde esta sección sindical se te anima a consultar los siguientes enlaces (irán aumentando, a medida que vayamos encontrando más):
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lunes, 13 de febrero de 2017
Compañera pasa a contrato indefinido
La pasada semana una compañera de programa ha pasado de estar contratada por obra y servicio determinado, a la modalidad de indefinida. Ésta era una de las reclamaciones de esta sección sindical. Otra cosa que se ha arreglado parcialmente es el almacén: ahora, por lo menos el riesgo es menor, aunque aún falta sacar mucha merdé.
Ahora bien, la Fundació Aldees Infantils SOS de Catalunya, optó por seguir manteniendo en una categoría inferior a esta trabajadora, junto a otra compañera del programa de Centro Abierto, pagándoles unos 200€ menos de lo que les correspondería, mientras siguen realizando tareas que corresponden a una categoría superior. ¿Cómo no se les cae la cara de vergüenza a los mandos directivos y al personal encargado de contratación, que saben perfectamente lo que está sucediendo?
Os animamos a que firméis en la plataforma Change.org, nuestra petición:
Ahora bien, la Fundació Aldees Infantils SOS de Catalunya, optó por seguir manteniendo en una categoría inferior a esta trabajadora, junto a otra compañera del programa de Centro Abierto, pagándoles unos 200€ menos de lo que les correspondería, mientras siguen realizando tareas que corresponden a una categoría superior. ¿Cómo no se les cae la cara de vergüenza a los mandos directivos y al personal encargado de contratación, que saben perfectamente lo que está sucediendo?
Os animamos a que firméis en la plataforma Change.org, nuestra petición:
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martes, 7 de febrero de 2017
¿Cómo denunciar a Inspección de Trabajo y que te salga bien?
A la hora de buscar aliados en la defensa de nuestros derechos, disponemos de la Inspección de Trabajo.
Aquí, en Barcelona, tienes las oficinas principales en Travessera de Gràcia, 303-311. Es un edificio feo y poco amable, pero tras esa fachada de «tía dura», Inspección de Trabajo es una amiga en quien podrás confiar, como dice la canción de los Fresones Rebeldes:
Bueno, tras este momento de pop ingenuo y un poco exagerado, vamos al tomate: ¿Cómo denunciar a tu empresa cuando no respeta la Ley? En este enlace se te explica cómo hacerlo, pero ten en cuenta:
En ocasiones, sucede que la empresa ya te tiene en el punto de mira por haber dicho algo «inapropiado» sobre las condiciones de trabajo. Denunciar a Inspección de Trabajo en los mismos términos en que te has quejado, puede suponer que los jefecillos aten cabos y quieran deshacerse de ti. No te desanimes, porque tienes otro amigo en quien poder confiar: el burofax.
El burofax es un servicio de Correos que se utiliza para enviar de manera urgente y segura documentos relevantes que puedan requerir una prueba frente a terceros.
En este caso, tú pones la denuncia en Inspección de Trabajo, con tu nombre y apellidos. Acto seguido, envías un burofax a la empresa con la copia de la denuncia. ¿Resultado? La empresa sabe que has sido tú, porque Correos le entrega en mano el burofax, de tu parte y con amor. Si trata de sancionarte, tú puedes presentar en el juicio la prueba de que la empresa hizo lo que hizo porque pusiste una denuncia contra ella.
Y es que, los trabajadores tenemos un gran derecho, que es como la madre del cordero de todos los derechos: la garantía de indemnidad, que como bien explican en esta web, «proteje al trabajador que ha ejercitado los derechos laborales (ejercicio de acciones judiciales, derecho de huelga o reclamaciones de cualquier otro tipo) mediante la declaración de nulidad de las sanciones (incluida la de despido) que la empresa pueda imponer a dicho trabajador como represalia por el ejercicio de tales derechos».
Es decir, que ninguna empresa puede «adoptar medidas de represalia derivadas del ejercicio por el trabajador de la tutela de sus derechos», porque es anticonstitucional. Solo con el burofax te asegurarías en el juicio que se dictara sentencia, obligando a la empresa a retirar las sanciones, incluido el despido, te readmitieran en tu puesto y encima no te pudieran despedir de nuevo, porque habría un indicio/prueba de que se te ha «castigado» por hacer algo que las leyes te permiten: expresarte e interponer acciones contra la empresa en relación a tus derechos.
Pero ojo, recordemos que las leyes marcan un tope en derechos y obligaciones para ambas partes, y la Inspección de Trabajo solo puede velar por el cumplimiento de determinada legislación. Más allá están las asambleas de trabajadores y el apoyo solidario de otros trabajadores a través del sindicato, es decir, la fuerza del número para ejercer presión y conquistar derechos. Por ejemplo: lograr el desbloqueo del convenio, cobrar mejores sueldos o disfrutar de más días de vacaciones, no está en manos de la inspección, sino de nuestra unidad y acción colectiva. Esta fuerza del cambio es la que históricamente ha mejorado nuestras condiciones laborales.
En conclusión: Inspección de Trabajo es una herramienta útil, a veces, para que la empresa cumpla la legislación vigente. Pero si queremos de verdad conquistar mejores condiciones, es imprescindible que nos unamos y que nos apoyemos en otras trabajadoras y trabajadores.
Aquí, en Barcelona, tienes las oficinas principales en Travessera de Gràcia, 303-311. Es un edificio feo y poco amable, pero tras esa fachada de «tía dura», Inspección de Trabajo es una amiga en quien podrás confiar, como dice la canción de los Fresones Rebeldes:
Si te sientes solo y triste
Sabes que una amiga existe
A quien tú podrás confiarte
La que puede aconsejarte
Llama
No te lo pienses y llama
A cualquier hora
Me llamas
Y yo estaré para ti...
Bueno, tras este momento de pop ingenuo y un poco exagerado, vamos al tomate: ¿Cómo denunciar a tu empresa cuando no respeta la Ley? En este enlace se te explica cómo hacerlo, pero ten en cuenta:
- Inspección no tiene potestad en todas las vulneraciones de derechos. Ejemplo: si la empresa te paga menos de lo que debiera, te toca poner una demanda para reclamar esas cantidades, en los juzgados de lo social.
- Si sois varias personas, mejor: cuando la inspección llegue al centro de trabajo, el discurso de la plantilla será más homogéneo. Además, así os acompañáis en el viaje alucinante hacia la conquista de vuestros derechos.
- Se ha de rellenar el formulario que viene en el enlace, ya sea en pdf o en formato de texto. Es necesario el CIF de la empresa, su nombre y dirección de las oficinas centrales, además de la de tu centro de trabajo. En Internet es fácil conseguir estos datos.
- Puedes poner o no tu nombre, apellidos, dirección y teléfono de contacto. Es recomendable hacerlo para que Inspección de Trabajo te llame antes de ir a la empresa y luego te informe de lo que ha hecho o ha dejado de hacer. Si pones la denuncia de forma anónima, no sabrás que determinación se habrá tomado.
- Haz un listado de lo que se incumple, haciendo referencia concreta a los artículos de la legislación y aportando cuantas pruebas tengas. Ejemplo: «No hay calendario laboral, según marca la normativa del Estatuto de los Trabajadores en su artículo 34 y el .... del convenio vigente». Si pones el número de referencia del convenio, facilitarás las cosas. El de Acció Social de Catalunya es el 7902575.
- Habrá situaciones de las que no dispongas de pruebas, pero no te preocupes: denuncia y explícate lo mejor posible, porque Inspección de Trabajo exigirá determinados documentos o pruebas a la empresa de que eso que dices que se está incumpliendo, realmente lo está cumpliendo.
- Una vez rellenado el formulario y dispuesta la documentación, fotocopia todo dos veces. Si tienes dudas, acude a una asesoría jurídica de un sindicato, para que te lo revisen. En CNT Barcelona es gratuita y solo has de pedir hora.
- Una vez hecha la denuncia, toca esperar unas semanas, a veces más. Tienes la opción de llamar al teléfono de las oficinas, 93-624-75-00, y preguntar por tu expediente, que aparece en el sello que te ponen una vez entregas la denuncia en ventanilla.
- No desesperes si te toca un señor o una señora con menos salero que un teletubbie: si no te soluciona nada, porque siempre hay otros aliados.
En ocasiones, sucede que la empresa ya te tiene en el punto de mira por haber dicho algo «inapropiado» sobre las condiciones de trabajo. Denunciar a Inspección de Trabajo en los mismos términos en que te has quejado, puede suponer que los jefecillos aten cabos y quieran deshacerse de ti. No te desanimes, porque tienes otro amigo en quien poder confiar: el burofax.
El burofax es un servicio de Correos que se utiliza para enviar de manera urgente y segura documentos relevantes que puedan requerir una prueba frente a terceros.
En este caso, tú pones la denuncia en Inspección de Trabajo, con tu nombre y apellidos. Acto seguido, envías un burofax a la empresa con la copia de la denuncia. ¿Resultado? La empresa sabe que has sido tú, porque Correos le entrega en mano el burofax, de tu parte y con amor. Si trata de sancionarte, tú puedes presentar en el juicio la prueba de que la empresa hizo lo que hizo porque pusiste una denuncia contra ella.
Y es que, los trabajadores tenemos un gran derecho, que es como la madre del cordero de todos los derechos: la garantía de indemnidad, que como bien explican en esta web, «proteje al trabajador que ha ejercitado los derechos laborales (ejercicio de acciones judiciales, derecho de huelga o reclamaciones de cualquier otro tipo) mediante la declaración de nulidad de las sanciones (incluida la de despido) que la empresa pueda imponer a dicho trabajador como represalia por el ejercicio de tales derechos».
Es decir, que ninguna empresa puede «adoptar medidas de represalia derivadas del ejercicio por el trabajador de la tutela de sus derechos», porque es anticonstitucional. Solo con el burofax te asegurarías en el juicio que se dictara sentencia, obligando a la empresa a retirar las sanciones, incluido el despido, te readmitieran en tu puesto y encima no te pudieran despedir de nuevo, porque habría un indicio/prueba de que se te ha «castigado» por hacer algo que las leyes te permiten: expresarte e interponer acciones contra la empresa en relación a tus derechos.
Pero ojo, recordemos que las leyes marcan un tope en derechos y obligaciones para ambas partes, y la Inspección de Trabajo solo puede velar por el cumplimiento de determinada legislación. Más allá están las asambleas de trabajadores y el apoyo solidario de otros trabajadores a través del sindicato, es decir, la fuerza del número para ejercer presión y conquistar derechos. Por ejemplo: lograr el desbloqueo del convenio, cobrar mejores sueldos o disfrutar de más días de vacaciones, no está en manos de la inspección, sino de nuestra unidad y acción colectiva. Esta fuerza del cambio es la que históricamente ha mejorado nuestras condiciones laborales.
En conclusión: Inspección de Trabajo es una herramienta útil, a veces, para que la empresa cumpla la legislación vigente. Pero si queremos de verdad conquistar mejores condiciones, es imprescindible que nos unamos y que nos apoyemos en otras trabajadoras y trabajadores.
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lunes, 6 de febrero de 2017
Francesc Torralba, el Observatorio de Ética y los valores de Aldeas Infantiles
El pasado viernes 3 de febrero, tuvo lugar en Barcelona bajo la batuta de Francesc Torralba Roselló, Presidente del Observatorio de Ética de Aldeas Infantiles, un debate sobre los valores de esta empresa. A dicho encuentro asistió gran parte de la Jet Set marbellí y los Reyes Magos de Oriente, Melchor, Gaspar y Baltasar.
¿De qué cuestiones habló el Presidente del Observatorio de Ética de Aldeas Infantiles?:
¿De qué cuestiones habló el Presidente del Observatorio de Ética de Aldeas Infantiles?:
- De la práctica cotidiana de los directivos de la Fundación de respeto por las leyes laborales, la libertad de expresión y la sindicación de los trabajadores.
- De una apuesta decidida por la no intromisión profesional para ahorrarse unos dinerillos -que vaya usted a saber a dónde van- en los dispositivos y recursos de la entidad.
- De la búsqueda de la Justicia Social a través de la igualdad de oportunidades, salarios, cotización a la Seguridad Social y otros derechos, en Aldeas.
- De -of course- propuestas de intervención socio-educativa basadas en evidencias científicas que permitan ayudar a niños y familias su plena integración en la sociedad.
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jueves, 2 de febrero de 2017
Éxito de la Sección Sindical de CNT en el Comedor Social de Navas
Eurest Catalunya S.L., es una empresa de restauración perteneciente a Compass Group, que da servicio en el Comedor Social de Navas y que cuenta, entre su plantilla con educadoras sociales.
En 2014, un grupo de, en su mayoría, trabajadoras, observando que sus condiciones de trabajo no eran las adecuadas, fue tomando conciencia de que podrían mejorarlas organizándose como sección sindical dentro de CNT.
La empresa, para asustar a las trabajadoras reivindicativas, despidió a finales del mencionado año a la Secretaria de Prevención de la Sección Sindical. Esto de las represalias es una estrategia típica de aquellas organizaciones que imaginan a sus empleados como esclavos de la inmediatez pero dóciles si se les acojona convenientemente. Sin embargo, el rocanrol es un ritmo contagioso y la sección con ayuda del sindicato y grupos afines, presionó a través de la Acción Directa, es decir, sin intermediarios, boicoteando a la empresa para que el acto de represión sindical tuviera para esta última sufriera un coste económico y de prestigio inasumible.
Ganó la Sección Sindical de CNT algo que desafortunadamente pocas veces se ve en estos últimos años por la falta de unión de los trabajadores: la compañera despedida logró la readmisión en su puesto de trabajo sin que un juez tuviera que decidir quien tenía razón, si la empresa o la trabajadora. Además, se conquistaron una serie de derechos laborales.
Desde esta victoria se han ido sucediendo otras tantas. Las reivindicaciones conseguidas son muchísimas: mayores condiciones de seguridad, pago de pluses y cantidades adeudadas, aumento y mejora de contratos y categorías, otra segunda victoria logrando la readmisión de un trabajador tras haber sido despedido, pago de cantidades adeudadas, rectificación de pliegos de condiciones, una mayor afiliación y militancia de la plantilla, además de la creación de otra sección sindical en Eurest Serveis Funeraris... En su blog vienen detalladas.
¿Qué enseñanzas podemos sacar de estos éxitos? Que la toma de conciencia, el compromiso personal, la superación conjunta del miedo a las represalias empresariales, la unidad del conjunto de trabajadores y el planteamiento de estrategias de confrontación contra las prácticas abusivas tienen como efecto ganar mayores y mejores derechos laborales.
En 2014, un grupo de, en su mayoría, trabajadoras, observando que sus condiciones de trabajo no eran las adecuadas, fue tomando conciencia de que podrían mejorarlas organizándose como sección sindical dentro de CNT.
La empresa, para asustar a las trabajadoras reivindicativas, despidió a finales del mencionado año a la Secretaria de Prevención de la Sección Sindical. Esto de las represalias es una estrategia típica de aquellas organizaciones que imaginan a sus empleados como esclavos de la inmediatez pero dóciles si se les acojona convenientemente. Sin embargo, el rocanrol es un ritmo contagioso y la sección con ayuda del sindicato y grupos afines, presionó a través de la Acción Directa, es decir, sin intermediarios, boicoteando a la empresa para que el acto de represión sindical tuviera para esta última sufriera un coste económico y de prestigio inasumible.
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Fuente: blog de CNT Eurest Catalunya |
Ganó la Sección Sindical de CNT algo que desafortunadamente pocas veces se ve en estos últimos años por la falta de unión de los trabajadores: la compañera despedida logró la readmisión en su puesto de trabajo sin que un juez tuviera que decidir quien tenía razón, si la empresa o la trabajadora. Además, se conquistaron una serie de derechos laborales.
Desde esta victoria se han ido sucediendo otras tantas. Las reivindicaciones conseguidas son muchísimas: mayores condiciones de seguridad, pago de pluses y cantidades adeudadas, aumento y mejora de contratos y categorías, otra segunda victoria logrando la readmisión de un trabajador tras haber sido despedido, pago de cantidades adeudadas, rectificación de pliegos de condiciones, una mayor afiliación y militancia de la plantilla, además de la creación de otra sección sindical en Eurest Serveis Funeraris... En su blog vienen detalladas.
¿Qué enseñanzas podemos sacar de estos éxitos? Que la toma de conciencia, el compromiso personal, la superación conjunta del miedo a las represalias empresariales, la unidad del conjunto de trabajadores y el planteamiento de estrategias de confrontación contra las prácticas abusivas tienen como efecto ganar mayores y mejores derechos laborales.
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miércoles, 1 de febrero de 2017
Lo regular del VI Convenio de Aldeas Infantiles SOS España
UGT y CC.OO., han firmado el VI Convenio Colectivo de la Asociación Aldeas Infantiles SOS de España. A quienes trabajéis en Aldeas Infantiles de Cataluña, este convenio no os afecta..., o sí, vamos a ver luego por qué.
CC.OO., dice en su boletín de la Federación de Enseñanza, que con la firma de este convenio con los jefazos de Aldeas, por fin han logrado regular la jornada laboral de esas esclavas de hoy en día, llamadas coloquialmente «Madres SOS», que pasarán a llamarse en breves «educadoras coordinadoras»...
Desgraciadamente, esta supuesta regulación de la jornada laboral de unas trabajadoras que actualmente realizan más de 120 horas a la semana de trabajo, cotizando por 40 y con un sueldo donde el salario base es más feo que Donald Trump cagando estreñido, se ha quedado en eso: regular tirando a mala.
Como bien dice CC.OO., el cambio de las condiciones actuales de las «Madres SOS» se hará «(...) paulatinamente durante la vigencia del convenio, siendo voluntaria la adscripción de las trabajadoras afectadas». Y como Aldeas Infantiles respeta los derechos conquistados y reflejados en las distintas normativas y leyes laborales, segurísimo que las «Madres SOS» van a poder ejercer libremente y sin presiones ni coacciones su derecho a acogerse a estas mejoras voluntarias.
Desde esta sección sindical se vuelve a insistir: si como trabajadores no queréis estos negociantes, organizaos en asambleas y sindicatos, y pelead vosotros las condiciones de trabajo que deseáis.
A Inspección de Trabajo le va a encantar escuchar las explicaciones de los directivos de Aldees Infantils SOS Catalunya cuando pregunte por qué incumplen la normativa laboral -nuevamente- aplicando en la Aldea de Sant Feliu de Codines un convenio que sólo es válido para la organización española, en lugar del II Conveni d'Acció Social amb infants, joves, etc., de Catalunya, y cómo es que tiene a unas figuras inexistentes en este último convenio, las «Madres SOS» catalanas, currando más de 120 horas a la semana y cotizando por 38'5.
CC.OO., dice en su boletín de la Federación de Enseñanza, que con la firma de este convenio con los jefazos de Aldeas, por fin han logrado regular la jornada laboral de esas esclavas de hoy en día, llamadas coloquialmente «Madres SOS», que pasarán a llamarse en breves «educadoras coordinadoras»...
Desgraciadamente, esta supuesta regulación de la jornada laboral de unas trabajadoras que actualmente realizan más de 120 horas a la semana de trabajo, cotizando por 40 y con un sueldo donde el salario base es más feo que Donald Trump cagando estreñido, se ha quedado en eso: regular tirando a mala.
Como bien dice CC.OO., el cambio de las condiciones actuales de las «Madres SOS» se hará «(...) paulatinamente durante la vigencia del convenio, siendo voluntaria la adscripción de las trabajadoras afectadas». Y como Aldeas Infantiles respeta los derechos conquistados y reflejados en las distintas normativas y leyes laborales, segurísimo que las «Madres SOS» van a poder ejercer libremente y sin presiones ni coacciones su derecho a acogerse a estas mejoras voluntarias.
Desde esta sección sindical se vuelve a insistir: si como trabajadores no queréis estos negociantes, organizaos en asambleas y sindicatos, y pelead vosotros las condiciones de trabajo que deseáis.
A Inspección de Trabajo le va a encantar escuchar las explicaciones de los directivos de Aldees Infantils SOS Catalunya cuando pregunte por qué incumplen la normativa laboral -nuevamente- aplicando en la Aldea de Sant Feliu de Codines un convenio que sólo es válido para la organización española, en lugar del II Conveni d'Acció Social amb infants, joves, etc., de Catalunya, y cómo es que tiene a unas figuras inexistentes en este último convenio, las «Madres SOS» catalanas, currando más de 120 horas a la semana y cotizando por 38'5.
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Donald Trump, regulando la jornada laboral de las «Madres SOS» |
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